EL VIERNES DE PASCUA...
El Jueves de Pascua… aún en su medio día había absorbido sin saberlo el crimen de un inocente y de la última esperanza de Jerusalén por evitar su destino, la destrucción. Los criminales del asesinato de EL RABÍ parecían haberse salido con la suya… Yahvé no había castigado su crimen.