Los trabajadores de la construcción descubrieron los restos en descomposición de 115 cuerpos de niños colocando la nueva carretera S19 en Jeżowe, cerca de la ciudad de Nisko, en la provincia de Podkarpackie, al sureste de Polonia. Este descubrimiento aparentemente extraño confirmó una creencia local de larga data de que un cementerio de niños perdidos estaba ubicado en algún lugar del área de Church Mountains. Los arqueólogos que investigaron el hallazgo descubrieron que muchos de los niños tenían monedas en la boca.
Según un artículo en The First News, los cuerpos de los niños fueron descubiertos durante el trabajo en una sección de la autopista S19, que forma parte del proyecto Via Carpatia de 700 kilómetros (435 millas) de largo que unirá los estados bálticos con el sudeste de Europa, pasando por Podlasie, Mazovia, Lublin y Podkarpacie. La Dirección General de Carreteras y Autopistas Nacionales ha confirmado el descubrimiento, diciendo que "entre el 70 y el 80 por ciento de todos los entierros son niños" y que los encontraron en un terreno arenoso en un eje este-oeste con la cabeza hacia el oeste.
Algunos de los esqueletos de los niños tenían monedas en la boca (Arkadia Firma Archeologiczna)
La mayoría de los cuerpos de los niños fueron enterrados en tumbas individuales, pero un grupo de cuatro cuerpos había sido colocado en formación cerrada, pero no uno encima del otro, y todas sus cabezas descansaban hacia un lado mirando hacia el oeste, hacia el sol poniente. El cuarto niño, descansando en el borde del grupo, era considerablemente más joven que los otros tres. Cuando los arqueólogos observaron más de cerca los cuerpos, descubrieron que muchos de los niños tenían monedas en la boca. En un artículo de Global Legal Chronicle, la arqueóloga Katarzyna Oleszek, que trabajó en el sitio, declaró que las monedas misteriosas son un signo de la creencia en "obols of the dead" (obols de los muertos- español) o "Charon's obol" que proviene de una tradición funeraria precristiana que fue practicado hasta el siglo XIX por el papa Pío IX.
En la mitología griega y romana, Charon o Kharon, era el barquero de Hades que transportaba almas de los recién fallecidos a través de los ríos Styx y Acheron que separaban el mundo de los vivos del mundo de los muertos. Se requería una moneda, conocida como "el obol de Charon", para pagarle a Charon el pasaje, que a menudo se colocaba en la boca de los muertos. La mayoría de las monedas encontradas en la boca de los niños habían sido acuñadas durante el reinado del rey Segismundo III Vasa de Polonia (1587-1632 d.C). También se descubrieron algunas monedas conocidas como boratynki que datan del reinado del rey Juan II Casimiro (1648-1668 d.C).
Retrato del rey Juan II Casimir Vasa. (Dominio publico)
No se recuperaron otros artefactos o artículos funerarios en el sitio: sin botones, clavos o incluso mangos de ataúd. La arqueóloga Katarzyna Oleszek dijo a la Agencia de Prensa Polaca que la comunidad que enterró a los niños probablemente era "muy pobre". Además, Oleszek dijo que la disposición de los esqueletos y su estado de conservación muestra que el descubrimiento es un cementerio de la iglesia católica. Se sabe por fuentes escritas que durante una visita de los obispos de Cracovia a Jeżowe en 1604 ya había "una gran iglesia parroquial, con un jardín, una rectoría, una escuela y un cementerio. Probablemente ya existía desde 1590. "
El hallazgo confirma las teorías de los arqueólogos y las especulaciones de los lugareños de que los niños fueron enterrados en un cementerio en el área de Church Mountains. (Arkadia Firma Archeologiczna)
El área en la que se descubrieron los niños fallecidos ahora está cubierta de bosques y no hay marcadores de tumbas, con solo una pequeña capilla que ofrece signos de la antigua iglesia. En una publicación de Facebook, los arqueólogos dijeron que los cuerpos ahora serán exhumados y luego de ser estudiados por los antropólogos, eventualmente serán trasladados a la iglesia parroquial local y vueltos a enterrar en el cementerio local para continuar su viaje a través del río Styx.
En un nivel sobrenatural y mitológico, uno solo espera que los cuerpos de los niños vuelvan a ingresar las monedas en sus bocas, ya que necesitan estos oboles de Charon para pagar el peaje del ferry que cruza el río Styx hasta la entrada al inframundo. En el pasado se decía que, si alguien no podía pagar la tarifa, nunca podría cruzar el río y que sus almas quedarían atrapadas para siempre entre este mundo y el próximo.
Imagen de portada: los niños enterrados encontrados en Polonia se encontraban en un terreno arenoso y estaban dispuestos en un eje este-oeste, todos con la cabeza hacia el oeste en la espalda con las manos a los lados. Fuente: Arkadia Firma Archeologiczna
Autor Ashley Cowie