Un singular edificio del período helenístico, datado en el siglo III a. C. y construido por los idumeos, ha sido desenterrado en la región israelí de Shefelah.
La impresionante estructura de 2.200 años de antigüedad, posiblemente un palacio o templo idumeo, fue descubierta durante las excavaciones arqueológicas realizadas en el yacimiento de Horvat ‘Amuda, situado en la fértil región israelí de Shefelah (una región de colinas bajas, situada entre la cordillera montañosa central de Israel y las llanuras costeras).
Área donde se encontró la gran estructura, posiblemente un templo o palacio, descubierto en el transcurso de unas excavaciones. Fotografía aérea (Foto: Dane Christensen)
Dentro del edificio, dos altares de piedra para incienso fueron descubiertos en una de las estancias. Uno de ellos incluye la imagen tallada de un toro, representado alzándose en lo que parece ser la fachada de un templo adornado con magníficas columnas. Los excavadores creen que el toro simbolizaba a una deidad adorada por los idumeos. Rodeando el altar para incienso, también fueron descubiertos por los arqueólogos recipientes de delicada cerámica, entre ellos cuencos pintados, pequeñas jarras, y lámparas de aceite.
Ejemplos de vasos y jarras para el culto descubiertos en una de las habitaciones de la estructura (Imagen: Clara Amit, Autoridad de Antigüedades de Israel)
“Si éste era de hecho un palacio o templo idumeo, es un singular y emocionante hallazgo –las estructuras similares en este país pueden contarse con los dedos de una mano. Parece que el edificio fue deliberadamente desmantelado, posiblemente durante la conquista asmonea de la región,” explicaban los directores de las excavaciones, Dr. Oren Gutfeld de la Universidad Hebrea, y Pablo Betzer y Michal Haber de la Autoridad de Antigüedades de Israel, en un comunicado conjunto hecho público en una nota de prensa de la AAI.
Altar para incienso con la imagen tallada de un toro, tal y como fue descubierto en el yacimiento de Horvat ‘Amuda (Imagen: Clara Amit, Autoridad de Antigüedades de Israel)
Los idumeos, como indica la palabra griega, eran descendientes de los edomitas bíblicos, un grupo de nómadas del desierto que habitaban la región montañosa situada entre el mar Muerto y el golfo de Aqaba (sur de Israel y Jordania). Sin embargo, en las épocas macabea y romana los límites geográficos de Idumea cambiaron para no incluir el corazón del antiguo Edom, situado al este de la región de Arabá, aunque sí abarcaban zonas de lo que anteriormente había sido territorio simeonita y de Judea.
Durante esta época, Horvat ‘Amuda era al parecer uno de los asentamientos agrícolas satélite de Maresha, que para entonces ya se había convertido en la capital del distrito de Idumea (hoy forma parte del Parque Nacional de Bet Guvrin-Maresha).
Está documentado que los idumeos sufrieron una aplastante derrota a manos de Judas Macabeo. (1 Macabeos 5,3) Más tarde, el historiador Josefo nos cuenta que, cuando Juan Hircano I conquistó a los idumeos, lo que ocurrió alrededor del 125 a. C., dijo a la gente que podría permanecer en su país sólo si se sometían a la circuncisión, obligándolos de este modo a convertirse en prosélitos. En lugar de abandonar el país, los idumeos cumplieron con esta condición y consiguientemente se mezclaron con la población de Judea (Antigüedades judías, XIII, 257, 258 [ix, 1].)
Los Herodes, la famosa familia que reinó sobre los judíos, eran idumeos.
Los restos de la estructura indican que fue intencionadamente desmantelada, posiblemente por los asmoneos (Imagen: Dane Christensen)
“Más tarde, en el 40 a. C., el líder asmoneo Antígono Matatías, con la ayuda de los enemigos de Roma, los partos, destruyó Maresha y expulsó a Herodes de Judea. Durante la Segunda Revuelta Judía contra Roma, en los años 132 d. C. – 135 d. C., los habitantes de la cercana Beit Guvrin rebajaron los estrechos pasajes y estancias cuadradas de Maresha para que sirvieran como escondites y almacenes” explicaba Kloner en el Times de Israel.
Alrededor de la zona de Horvat ‘Amuda, los excavadores también encontraron numerosos espacios subterráneos, utilizados como canteras o para albergar baños rituales (miqvaot), prensas de aceite y palomares. También se hallaron túneles para ocultarse de la época de las revueltas judías contra los romanos; uno de ellos contenía una olla intacta del tiempo de la Rebelión de Bar Kojba (132 d. C. – 135 d. C.).
Descubrimiento de la estructura. (Imagen: Michal Haber, Autoridad de Antigüedades de Israel)
Los nuevos descubrimientos salieron a la luz gracias a la ayuda de drones equipados con cámaras – una tecnología que se ha convertido en parte de la “caja de herramientas” de los arqueólogos en los últimos años. Como parte de un ambicioso proyecto de investigación arqueológica de la zona comprendida entre Bet Guvrin y Maresha por el norte y Moshav Amatzia por el sur, las cámaras de los drones fotografiaron los restos arqueológicos desde las alturas, revelando de este modo los vestigios de la estructura que está siendo excavada actualmente.
Las excavaciones realizadas en Horvat ‘Amuda, financiadas por la Fundación Beit Lehi y la Autoridad de Antigüedades de Israel, se llevaron a cabo con la participación de estudiantes de arqueología de la Universidad Hebrea y la Universidad Bar Ilán, así como de un grupo de voluntarios de los Estados Unidos.
Imagen de portada: Los dos altares para incienso hallados en una de las estancias de la estructura recientemente descubierta en Israel (Fotografía: Michal Haber, Autoridad de Antigüedades de Israel)
Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.