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Ancient Origins España y Latinoamérica

El Cementerio Perdido: Cientos de Niños Enterrados en un Viejo Fuerte Circular Irlandés

En el interior del fuerte circular de Tullycrine en West Clare, Irlanda, los visitantes pueden contemplar las tumbas de cientos de niños que datan de un período de la historia irlandesa en el que aquellos que no habían sido bautizados eran excluidos de ser enterrados en tierra consagrada.

Los enterramientos fueron realizados según la norma del siglo V de San Agustín de Hipona, que declaró que las almas de los niños no bautizados estaban condenadas al infierno a causa del pecado original. Esta norma se relajó en cierto grado más tarde, pero desde Roma aún se dictaba quién podía o no podía recibir un enterramiento cristiano apropiado. Esto significaba que lugares como el fuerte circular de Tullycrine se convertían en cementerios comunales para los niños que morían antes de haber sido bautizados.

La tumba de cada niño está marcada con diminutas losas. Estos enterramientos son conocidos como “Cillins” o “Cillini”, y se los puede encontrar por toda la Irlanda rural. En algunos casos, hay incluso poblaciones que toman su nombre de ellos, como Killeen en el condado de Armagh. Las primeras referencias académicas a estos lugares aparecen en las obras de los anticuarios del siglo XIX. En 1939, Seán O’Súilleabhaìn escribió un artículo en el que afirmaba que incluso en épocas paganas, los niños que morían pocos días después de nacer eran enterrados aparte, lejos de los adultos. Los Cillini se ubicaban a menudo en las cercanías de un pozo sagrado, o en ocasiones en las proximidades de un cruce de caminos, o sobre una línea fronteriza.

Mapa del Condado de Clare, en Irlanda (Wikimedia Commons)

La ceremonia de enterramiento que se daba a los niños era una cuestión en cierto modo ritual que tenía lugar de noche y en la que solo participaban hombres. 

“A otros miembros de la familia no se les inducía a reconocer el nacimiento del niño, o a acompañarle en su último viaje” dijo Flan Kelly, un campesino local, en declaraciones a The Irish Examiner:

“Así era como se hacía en aquellos días. Y esta es una tradición que continuó hasta los años cincuenta e incluso quizás hasta los sesenta. No disponemos de registros exactos, pero estimamos que había cientos de tumbas en este fuerte. No es habitual que se descubran tumbas de este tipo en el interior de un fuerte, teniendo en cuenta que en el pasado se creía que estaban habitados por hadas. Pero quizás se debiera precisamente a esta razón el hecho de que la gente enterrara ahí a sus bebés difuntos. Actuando así, sabían que los dejaban en un lugar en el que jamás serían molestados por nadie. Pero no sólo se enterraban bebés aquí; creemos que también muchos adultos, humildes jornaleros o gente que moría en la cuneta durante la hambruna y cuyos cadáveres no eran reclamados por sus familias están asimismo enterrados en este lugar.”

El Sr. Kelly, con la colaboración de John Deely y la Sociedad para el Patrimonio de Kilmurry McMahon, ha trabajado muy duro para asegurarse de que estos enterramientos no sean olvidados por las futuras generaciones. El lugar está protegido de reses y otros animales sueltos por una valla electrificada de alambre de espino, y se ha adquirido un corto tramo de carretera para habilitar un acceso al público. También se erigió una placa memorial en el año 2008 y el lugar fue bendecido por el entonces Obispo de Killaloe, Willie Walsh.

La placa conmemorativa en el Fuerte/Cementerio de los Niños, también conocido por su nombre gaélico de Lios na Leanai, en Tullycrine, Condado de Clare, Irlanda (Irish Examiner)

“Lios na Leanai nos recuerda un tiempo en el que el concepto de Dios era mucho más duro que en la actualidad, y en el que veía a Dios como a un juez severo” afirmó el Obispo. “Hemos sido lo bastante afortunados como para vivir, por así decirlo, en una época menos dura y en tiempos en los que verdaderamente creemos que nuestro Dios es un Dios de amor. Afortunadamente con el paso de los años creo que hemos mejorado nuestra comprensión de Dios.”

No muy lejos está el Pozo Sagrado de Tullycrine, que es conocido también como Pozo Sagrado de Tobergrowata Tobar na Rabhartaí en los viejos mapas de la agencia británica de cartografía (Ordnance Survey). A día de hoy se le conoce más popularmente como el pozo de St Mary. Como otros lugares similares de las islas Británicas, es increíblemente antiguo y puede proceder originalmente de remotas épocas precristianas. No obstante, tales pozos fueron más tarde adoptados por la sociedad rural cuando los británicos intentaron aplastar la fe Católica en Irlanda.

El Pozo Sagrado de Tullycrine, en Tullycrine, Irlanda (Janet/Blogging from the Bog)

Según el Sr. Kelly “hay muchos pozos como éste al Oeste del Condado de Clare”. Y a continuación añade:

“Cuando los británicos estaban en Irlanda, acabaron con las iglesias, así que la gente empezó a venir a sitios como estos pozos para mantener viva su religión. Pero una vez que la gente pudo volver a sus iglesias, este tipo de pozos se dejaron de lado y en gran medida cayeron en el olvido. Llevo alquilando este terreno desde hace unos 15 años y un buen día redescubrí el pozo. Estaba cubierto de matorrales; todo lo que quedaba de él era un túmulo de piedras y una pequeña imagen de la Santísima Virgen. Estaba inundado de agua y en muy, muy mal estado.”

Kelly y Deely colaboraron en la limpieza del pozo y se formó una comisión para lanzar una campaña de recaudación de fondos. Esto a su vez generó interés entre la comunidad local, y el Pozo Sagrado está ahora siendo venerado regularmente con bendiciones y rezo del rosario el último domingo de mayo y rosarios todos los domingos de Octubre.

La gente a menudo creía que estos antiguos pozos eran lugares de sanación. El Departamento del Proyecto de Escuelas Primarias de Folklore Irlandés (1937-38) registra antiguos relatos relacionados con ellos, como el de una mujer que recuperó la vista tras visitar el pozo de Tullycrine. En otras historias se cuenta que el pozo iba cambiando de sitio con el paso del tiempo, desapareciendo y volviendo a aparecer de nuevo en otro lugar de estos mismos terrenos.

Quizás fueron las hadas, esos seres misteriosos mencionados a menudo en las historias rurales y a los que se relaciona con trucos de este tipo. ¿Cómo saberlo con certeza…?

Imagen de portada: Pequeña tumba en el Fuerte de los Niños de Tullycrine, en Irlanda (Janet/Blogging from the Bog)

Autor: Robin Whitlock

Traducción: Rafa García

Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.