En torno al año 60 d. C., la reina Boudica de los Icenos (una tribu céltica), atacó y arrasó Londinium, la antigua Londres, capital de la Britania romana. Ahora, investigadores del departamento de arqueología del Museo de Londres acaban de anunciar que en respuesta a la salvaje rebelión de Boudica y sus guerreros, los aterrados y avergonzados romanos construyeron una fortificación con fosos de 3 metros de profundidad, murallas de 3 metros de altura, empalizadas y una plataforma transitable desde la cual rechazar los posibles ataques.
La reina Boudica, cuyo nombre también podemos encontrar escrito como Boudicca y Boadicea, constituía una visión imponente e incluso aterradora según el historiador romano Dion Casio, quien la describe en su obra, así como a la destrucción provocada por su ejército:
...un terrible desastre acaeció en Britania. Dos ciudades fueron saqueadas, ocho mil de los romanos y sus aliados perecieron, y la isla se perdió para Roma. No solo eso, sino que quien ocasionó toda esta ruina a los romanos fue una mujer, un hecho que en sí mismo les causaba una gran humillación… pero la persona que fue la principal responsable de incitar a los nativos y convencerles de que lucharan contra los romanos, la persona considerada digna de ser su líder y que dirigió y encabezó la guerra por completo, fue Buduica, una mujer britana de familia real y poseedora de una inteligencia mucho mayor de la que es habitual entre las mujeres… Era muy alta de estatura, terrorífica en apariencia, fiera su mirada y atronadora su voz; una cascada de cabellos leonados caía hasta su cintura; en torno a su cuello portaba un collar de oro; y llevaba puesta una túnica de varios colores que cubría con un manto cerrado mediante un broche. Éste era su aspecto invariablemente.
El Torque de Snettisham, collar de oro probablemente similar al que solía lucir Boudica. (Universidad de Chicago)
No es de extrañar que los aterrados romanos construyeran una fortificación de tal magnitud.
Como podemos leer en este breve artículo del MOLA (Museum of London Archaeology): “Situada sobre la carretera principal en dirección a Londinium, controlando la ruta que llevaba a la ciudad desde el puente y vigilando el río, la fortificación habría dominado la ciudad en esta época, reflejando quizás la ausencia de vida civil y la total destrucción provocada por las tribus britanas en la Londres romana.”
El gobierno británico, en unas excavaciones realizadas en el Plantation Place de Fenchurch Street, ha descubierto la existencia de esta fortificación de madera y tierra, que ocupaba una superficie de unas 15 hectáreas. Medía 3 metros de altura y estaba reforzada con turba y tablones intercalados. Disponía también de una plataforma desde la que combatir, con una empalizada y torres en sus puertas dominando la orilla del río.
Para mayor protección, la fortificación se encontraba rodeada por fosos dobles de unos dos metros de ancho y tres de profundidad. Una nota de prensa emitida por el MOLA se refiere a estos fosos como “un obstáculo impresionante para eventuales atacantes.”
Esquema de una posición defensiva romana. (MOLA)
Al parecer, la fortificación era una estructura de emergencia de carácter temporal cuya intención no era ser ocupada a largo plazo, y fue utilizada para refundar y reconstruir el asentamiento, que constituía un importante centro de comercio. En la web del MOLA podemos leer que los investigadores hallaron pruebas de la utilización de tiendas en el interior de la fortificación en lugar de barracones de carácter permanente. Solamente estuvo en uso 10 años.
Julian Hill, miembro del MOLA y experto estudioso de la Londres romana, afirma en la nota de prensa emitida por este organismo: “El descubrimiento de esta antigua fortificación romana aporta una valiosa información acerca de cómo los romanos reestablecieron su control sobre Gran Bretaña tras el terrible golpe que les asestó Boudica. También demuestra la importancia estratégica que tenía Londres ya en aquella época.”
‘Boadicea arengando a los britanos’, óleo de John Opie. (Public Domain)
Leemos en la web del Museo de Londres acerca del reciente descubrimiento:
El ejército romano era experto en fortificaciones; hizo acopio de materiales propios de la región en los bosques cercanos de forma muy eficaz, e incluso utilizó los escombros de los edificios que ardieron durante la rebelión. Se calcula que una fortificación de este tamaño habría podido albergar una cohorte de aproximadamente 500 hombres, aunque pudo ser construida a mano en cuestión de semanas, quizás con la ayuda de prisioneros britanos. Los arqueólogos han descubierto en el yacimiento un pico y un martillo, herramientas de las que probablemente hicieran uso las tropas romanas al construir sus fortificaciones.
La fortificación disponía de carreteras, almacenes y oficinas, además de una cocina de campaña, un granero y una letrina. Se hallaron en ella muy pocos objetos, aunque los arqueólogos han logarado desenterrar parte de un casco y algunas monturas de caballos.
Antiguas piezas arqueológicas del ejército romano halladas en la fortificación de Plantation Place. (MOLA)
Leemos asimismo en el artículo del MOLA: “Varios proyectos de importantes infraestructuras contemporáneos a la construcción de la fortificación apuntan a que el ejército desempeñó un papel esencial en esta reconstrucción, aportando la mano de obra y los conocimientos de ingeniería necesarios para construir carreteras, unos nuevos muelles y una máquina para bombear agua, instalaciones vitales todas ellas para reactivar el comercio y la vida civil de la ciudad.”
Unos 60 años después del ataque de Boudica, los romanos construyeron el fuerte de Cripplegate, y posteriormente en el siglo III d. C. se levantó una gran muralla en torno a Londinium. Los arqueólogos buscan ahora fortificaciones y otras estructuras defensivas construidas durante los períodos intermedios.
Entablado del ‘vallum’ de la fortificación (MOLA)
Imagen de portada: Recreación artística de la fortificación de Plantation Place hallada recientemente en Londres. (MOLA)
Autor: Mark Miller
Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.