Los moldes de yeso de 86 víctimas agonizantes de la erupción del Monte Vesubio, acaecida en el año 79 d. C., serán exhibidos el próximo Martes, 26 de Mayo del 2015, en el Museo Nacional de Arqueología de Nápoles, Italia.
Las gentes de Pompeya, ciudad romana, daban sus últimos estertores cuando una nube de gas procedente del volcán los envolvió, matándolos. El gas estaba a 300 grados centígrados (572 grados F). De las expresiones de sus caras y sus convulsiones puede deducirse, claramente, que fueron cogidos por sorpresa cuando la nube de ceniza, finalmente, los consumió.
Según dice un artículo publicado en ANSA.com:
Los dientes asoman entre sus labios, tensos de dolor. Ardiendo sin llama, con la piel incrustada, sus cráneos, huesos y mandíbulas al descubierto, fueron atrapados en el momento de su muerte, cuando la nube ardiente de 300 grados centígrados abrasó sus cuerpos de golpe, quemando sus entrañas y enterrándolos bajo toneladas de ceniza y piedras. Entre ellos aparece la familia de la Casa de la Pulsera De oro: una mujer con un bebé sobre su regazo. Cerca de ellos, un hombre con otro niño, quizá de dos años.
Increible imagen mostrando a un niño que se sienta sobre su madre cuando la nube de cenizas les golpea. Foto: Splash News
Los cuerpos reales, que fueron osificados por el calor, no serán mostrados en la exposición, sino sus moldes exactos de yeso.
Massimo Osanna, Superintendente de Arqueología de Pompeya y ciudades cercanas explicó: "Hasta ahora nunca habían sido inspeccionados, ya que estos restos humanos siempre fueron estudiados según la ética más estricta. No se trata de estatuas de bronce o yeso, sino de verdaderos seres humanos que deben ser tratados con el máximo respeto."
Algunas víctimas estaban en plena agonía cuando les atrapó la nube volcánica de gas. (Bigstock photo)
El arqueólogo Giuseppe Fiorelli descubrió los cuerpos en 1863 y acabó encontrando el modo de detectar y extraer los cuerpos, intactos, de los lugares donde descansaban en Pompeya. Los científicos también hallaron animales, incluidos un perro y un cerdo, pero estos no serán expuestos en el museo. Los animales han sido restaurados con propósitos científicos y arqueológicos, continuó explicando Osanna.
Un equipo de científicos, entre los que se cuentan arqueólogos, ingenieros, un antropólogo, expertos de restauración y radiólogos, está emprendiendo el Proyecto Gran Pompeya, un trabajo antropológico a través del cual se intentará extraer y copiar el perfil genético de las desafortunadas víctimas de la erupción. Los científicos esperan conseguir una mejor comprensión de su modo de vida y poder identificarlos por completo. Publicarán sus conclusiones y se grabará un documental producido por una empresa de restauración arqueológica de Salerno.
Pompeya era una floreciente ciudad romana fundada en el siglo VI a. C. hasta que quedó congelada en el tiempo, conservada bajo las capas de ceniza que había vomitado el Monte Vesubio en la gran erupción del siglo I. Aunque Pompeya fue redescubierta a finales del siglo XVI, sólo se comenzó a excavar en ella de forma correcta a partir del siglo XVIII. Los obreros que la descubrieron se sobresaltaron ante los frescos sexualmente explícitos que estaban desenterrando y que herían las sensibilidades de los ciudadanos medievales de Roma, así que procedieron a cubrirlos rápidamente.
Frescos eróticos descubiertos en Pompeya. Fuente: (BigStockPhoto)
Cuando las excavaciones continuaron, casi dos siglos después, los arqueólogos hallaron la ciudad casi completamente intacta: los panes aún en los hornos, los cuerpos de hombres, mujeres, niños y animales domésticos como congelados en sus últimos momentos, con las expresiones de temor aún impresas sobre sus rostros e incluso restos de comida esparcidos sobre el pavimento. Tan asombroso descubrimiento supuso que los investigadores pudieran disponer de un fragmento exacto de la Historia, conociendo así numerosos detalles de cómo era la vida cotidiana de los antiguos habitantes de Pompeya: los alimentos que comían, los trabajos que realizaban y las casas en que vivían.
La ciudad de Pompeya (Bigstock photo)
Se pueden ver fotografías de los investigadores trabajando con los cuerpos durante el proceso de fabricación de moldes en el Daily Mail.
Fotografía de Portada: Algunas víctimas se encontraban sentadas o tumbadas cuando la nube de gas extremadamente caliente los envolvió. (Bigstock photo)
Autor: Mark Miller
Traduccióm: Mariló T. A.
Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.