Tres arqueólogos aficionados han descubierto recientemente el mayor tesoro vikingo de oro hallado jamás en Dinamarca. De unos 900 gramos de peso, la colección consta de siete brazaletes bellamente labrados, seis de oro y uno de plata. El de plata pesa unos 90 gramos.
“En el Museo de Sønderskov estamos realmente encantados con los seis brazaletes de oro que nos han sido entregados recientemente. Han sido descubiertos por Poul, Kristen y Marie, que forman el grupo de detectores de metales Team Rainbow,” leemos en la página de Facebook del museo. Los nombres completos de los descubridores son Poul Nørgaard Pedersen, Marie Aagaard Larsen y Kristen Dreiøe.
El equipo Team Rainbow Power está formado por Poul Nørgaard Pedersen, Marie Aagaard Larsen y Kristen Dreiøe (Fotografía: Jørn Larsen)
Uno de los brazaletes estaba decorado al estilo Jelling – un estilo de arte que se considera íntimamente relacionado con las clases más altas de la sociedad vikinga. Este hecho podría implicar que algunos de los personajes más cercanos al rey residían en la municipalidad de Vejen.
El equipo descubrió estas piezas en unos campos de Vejen, Jutlandia. Larsen ha explicado al Museo Nacional Danés (que ha emitido una nota de prensa sobre el hallazgo) que llevaba solo diez minutos con el detector de metales cuando encontró los brazaletes de oro. Según el Museo Nacional Danés, las piezas datarían del siglo IX d. C.
“Realmente sentíamos que habíamos encontrado el oro que hay al final del arco iris cuando vimos el primer brazalete, pero cuando fueron apareciendo más nos pareció casi irreal,” ha explicado Larsen al museo. Los otros dos miembros del equipo son Dreiøe, su marido, y el amigo de ambos Pedersen.
El comisario artístico del Sønderskov Museum y arqueólogo Lars Grundvad ha comentado al respecto: “En el museo habíamos hablado de que sería interesante explorar la zona con un detector de metales, ya que en 1911 se encontró una cadena de oro de 67 gramos. Pero los arqueólogos aficionados, en el transcurso de unos pocos días, han descubierto siete brazaletes vikingos, algo que no habría imaginado ni en mis sueños más salvajes.”
Según Grundvald, los siete brazaletes están probablemente relacionados con la cadena de oro hallada en 1911.
Peter Pentz, experto en cultura vikinga del Museo Nacional de Dinamarca, ha explicado que “Encontrar solo uno de estos brazaletes ya es algo grande, así que encontrar siete es algo muy muy especial. La época vikinga es en realidad la “época de la plata” en relación con los tesoros. La gran mayoría de los tesoros vikingos solo contienen plata. Si hay oro, siempre es una pequeña parte, no la mayor parte como en este caso.”
Uno de los brazaletes. Obsérvense las cabezas de dragón. (Fotografía: Arnold Mikkelsen, Museo Nacional de Dinamarca)
Según Pentz no le cabe duda de que el tesoro pertenecía a la élite vikinga, y de hecho los brazaletes podrían haber sido utilizados por algún jefe como regalos para forjar una alianza, o como recompensas o brazaletes de juramentos para sus hombres.
Según un artículo de Hurstwic.org sobre las clases sociales vikingas, la sociedad vikinga estaba fundamentalmente dividida en tres grandes grupos: la clase media (karls), la nobleza (jarls), y los esclavos (þræll), apresados como botín de guerra o en ocasiones individuos que habían sido incapaces de abonar una deuda, convirtiéndose de este modo en esclavos de sus acreedores. En el artículo también podemos leer, entre otras cosas, que los miembros de la sociedad vikinga podían cambiar de una clase social a otra, añadiendo además que:
“Por encima [de los karls] estaban los jarls, la nobleza. Las crónicas indican que los jarls habitaban en magníficos salones y llevaban vidas refinadas en las que desarrollaban una miríada de actividades. Pero no disponemos de evidencias arqueológicas que puedan confirmar estos detalles.”
Los jarls se distinguían por su riqueza, medida en términos de seguidores, tesoros, barcos y bienes inmuebles. El hijo primogénito del jarl era el candidato número uno para convertirse en el próximo jarl. Pero mediante la obtención de fama y riquezas, un karl podía también convertirse en jarl. El poder de un jarl dependía de la buena voluntad de sus partidarios. El deber esencial del jarl era proteger la seguridad, la prosperidad y el honor de sus seguidores.
¿Pero qué pudo provocar que unas piezas tan valiosas acabaran bajo tierra?, se preguntan tanto Pentz como Grundvad. Pentz opina que quizás alguien las enterró con la intención de volver a recuperarlas más tarde, lo cual por alguna razón le resultó imposible.
“Sería interesante examinar el lugar del hallazgo más de cerca, ya que podría aclararnos por qué este valioso tesoro acabó enterrado,” apunta Pentz.
Por su parte, Grundvad está de acuerdo en que una exploración arqueológica podría aportar pistas que permitan explicar por qué fueron enterrados estos valiosos brazaletes. El comisario del Sønderskov Museum espera que la noticia del hallazgo pueda ayudar a los arqueólogos a realizar excavaciones, quizás este próximo otoño, en el lugar del descubrimiento, que por ahora se mantiene en secreto.
El mayor tesoro vikingo de oro hallado hasta el momento en Dinamarca pesaba 750 gramos y se encontró en Vester Vestad, en el sur de Jutlandia.
Los tres descubridores serán recompensados antes de que los brazaletes sean expuestos en el Museo Nacional de Dinamarca.
Imagen de portada: Estos siete brazaletes probablemente pertenecieran a un noble vikingo, y quizás los empleara en el pasado para forjar una alianza o para premiar a sus hombres. (Fotografía: Museo Nacional de Dinamarca)
Autor: Mark Miller
Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.