Un reciente estudio genético de nuestros ancestros masculinos demuestra que hubo períodos en la prehistoria en los que una élite formada por apenas un puñado de hombres controlaba la reproducción.
Por ejemplo, un solo hombre de hace unos 190.000 años fue el ancestro de los 1.200 individuos varones procedentes de 26 grupos de población de todo el mundo cuyos genes fueron analizados en este estudio.
¿Quién sabe si aquel hombre de hace tantos miles de años tenía unos buenos genes? ¿Hubiera sido nuestro mundo diferente si hubiese sido otro quien hubiera engendrado a tantos seres humanos?
Podríamos también preguntarnos cómo es posible que este hombre dispusiera de tantas mujeres a lo largo de su vida. Vivió en los albores de la historia del Homo sapiens como especie, así que quizás fue por una cuestión de aritmética y no necesariamente por tener una gran cantidad de parejas que sus genes acabaron predominando en la humanidad.
Pero la cosa no acaba ahí: los estudios genéticos demuestran que algunos miles de años más tarde unos pocos hombres fueron los responsables de la mayor parte de la descendencia en una época determinada.
Estas interesantes incógnitas no reciben respuesta en la nota de prensa emitida por el Instituto Sanger de Cambrige, que informa del reciente estudio en el que se ha descubierto que los descendientes de este antiguo patriarca se encuentran esparcidos por todo el mundo. El Dr. Chris Tyler-Smith ha dirigido este estudio, el de mayor envergadura realizado hasta ahora sobre las variaciones genéticas globales del cromosoma Y (masculino). Leemos en la nota de prensa:
En el estudio […] se han analizado las diferencias existentes entre las secuencias de los cromosomas Y de más de 1.200 hombres procedentes de 26 poblaciones de todo el mundo, utilizando datos generados por el Proyecto 1000 Genomas. Analizando los cromosomas Y de los hombres actuales podemos conocer la vida de nuestros ancestros. El cromosoma Y se transmite únicamente de padres a hijos varones, por lo que está completamente ligado a las características y comportamientos masculinos. El equipo ha empleado estos datos para confeccionar un árbol de estos 1200 cromosomas Y; se trata de un esquema que nos muestra la relación que tienen unos con otros. Como se esperaba, todos ellos descienden de un solo hombre que vivió aproximadamente hace 190.000 años.
Otro descubrimiento derivado de este estudio es que un hombre que vivió en Europa hace unos 4.000 años es el ancestro de la mitad de la población masculina actual de Europa Occidental. El Dr. Tyler-Smith comenta en The Telegraph: “La genética no puede explicarnos por qué ocurrió, pero sabemos que una élite masculina muy reducida controlaba la reproducción y dominaba a la población. La mitad de la población de Europa Occidental desciende de un solo hombre.”
Mapa mundial de los haplogrupos del cromosoma Y: haplogrupos de las poblaciones precoloniales y posibles rutas migratorias. (CC BY SA 3.0)
El Dr. Tyler-Smith afirma en la nota de prensa: “La mejor explicación posible a este hecho es que podría ser el resultado de avances tecnológicos que estaban controlados por pequeños grupos de hombres. La rueda como medio de transporte, el trabajo de los metales y la organización en la guerra son posibles causas que serán investigadas en el futuro.”
El estudio ha detectado una explosión demográfica en la población masculina que tuvo lugar hace entre 55.000 y 50.000 años en Asia y Europa, y otra hace unos 15.000 años en el continente americano. Rápidas expansiones posteriores de las poblaciones masculinas tuvieron lugar en el África Subsahariana, Europa Occidental, Asia Meridional y el Extremo Oriente, hace entre 8.000 y 4.000 años.
Leemos en la nota de prensa: “El equipo cree que los crecimientos de población más antiguos fueron el resultado de las primeras colonizaciones por parte de seres humanos modernos de vastos continentes en los que había abundantes recursos disponibles.”
Crecimiento de los diferentes haplogrupos en diversas regiones del mundo. (Instituto Sanger de Cambridge)
Hace casi un año un equipo de científicos informó en la revista Nature de que la mayor parte de los hombres europeos descendían de apenas un puñado de ancestros masculinos de la Edad del Bronce.
Según los investigadores, la presencia de material genético de apenas un puñado de hombres en la secuencia del cromosoma Y es el resultado de una explosión demográfica que tuvo lugar hace varios miles de años. El equipo científico ha descubierto que hace entre 2.000 y 4.000 años se experimentó un enorme incremento de la población en una franja que abarca desde Grecia y los Balcanes hasta las Islas Británicas y Escandinavia.
Los científicos que están realizando el estudio han especulado también con la posibilidad de que los cambios tecnológicos y culturales influyeran en estas explosiones demográficas.
Guerreros de la Edad del Bronce. (CC BY NC SA 2.0)
Según el profesor Mark Jobling de la Universidad de Leicester: “La expansión de la población tiene lugar en plena Edad del Bronce, una época que trae cambios en las formas de enterramiento, en la que se extiende la práctica de la equitación y se desarrolla y mejora la fabricación de armas. Los varones dominantes vinculados a estas culturas podrían ser los responsables de los patrones de cromosoma Y que observamos en la actualidad.”
Imagen de portada: Representación artística de la Edad de Piedra obra de Viktor Vasnetsov. (Public Domain)
Autor: Mark Miller
Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.