Flavius Zeno fue un emperador romano del siglo V, cuyo reinado estuvo plagado de revueltas domésticas y disensiones religiosas, ¡y parece que tuvo la misma mala suerte en la muerte que en la vida! Según los historiadores griegos bizantinos, Zeno fue enterrado vivo accidentalmente después de enfermarse.
Sin embargo, cuando se escucharon sus gritos provenientes de su sarcófago, ¡su esposa se negó a abrir su tumba!
Semissis del emperador Zenón. Casa de la moneda de Constantinopla. Golpeado AD 477-491 (CC BY-SA 2.5)
Zenón fue emperador romano de Oriente desde el 474 al 475 d.C., y nuevamente desde el 476 al 491 d.C. Su reinado vio la caída del Imperio Romano Occidental.
El 9 de abril de 491 d.C., Zeno murió en Constantinopla. Los registros históricos no son claros en cuanto a la causa de su mala salud, pero los informes indican que puede haber sido disentería, epilepsia o "perder el sentido por beber".
Según dos historiadores griegos bizantinos de los siglos XI y XII, Joannes Zonaras y George Kedrenos, se pensaba que Zeno había muerto por beber o por una enfermedad y su cuerpo fue colocado en un sarcófago en la Iglesia de los Santos Apóstoles. Sin embargo, despertó de su estado de inconsciencia y durante tres días se escucharon gritos de "ten piedad de mí" provenientes de su interior.
Zonaras y Kedrenos informaron que la esposa de Zeno, la emperatriz Ariadne, que era hostil hacia su esposo, se negó a permitir que sus súbditos intervinieran y abrieran su tumba. Si estos informes son ciertos, Zeno habría tenido una muerte lenta por asfixia y deshidratación.
Imagen de Portada: Zeno fue enterrado vivo. Fuente: alswart / Adobe Stock
Autor Joanna Gillan